«Lo que se está jugando es muy grande. Acá está en juego la libertad de manifestarse», subrayó la dirigente del Partido de Trabajadores por el Socialismo (PTS), Myriam Bregman, quien recientemente dejó su banca en la Cámara de Diputados en el marco del acuerdo de rotación que impulsa su partido político.
En diálogo con C5N, mostró su preocupación por el modelo represivo desplegado por Javier Milei y su ministra de Seguridad, Patricia Bullrich, cuestionó el rol del resto de las fuerzas opositoras, expuso las consecuencias y los negociados detrás de la Ley Bases y remarcó la urgencia de poner un freno al Gobierno a través de «una verdadera alternativa política».
Para Bregman, la violencia desplegada en las últimas semanas, que incluyó la detención de personas por el solo hecho de manifestarse contra la Ley Bases, exhibe el accionar de un Gobierno que quiere ocultar el descontento social, que se percibe «también entre quienes votaron a Milei». «Bullrich quiere que no se expresen en la calle porque sabe que la calle es determinante», señaló, y agregó que lo que se busca es «generar temor social» para controlar este tipo de movilizaciones.
En este contexto, objetó a la oposición por brindarle herramientas a Milei y no tener presencias en las calles, mientras instó a Diputados a no dar quórum a la Ley Bases tras denunciar que hubo favores que pueden configuran hechos de corrupción. Ante este escenario, convocó a la construcción de una alternativa política «que muestre un programa totalmente distinto». «O pensamos una alternativa que cambie de raíz esta situación o no hay salida», sentenció.