Maigua destacó que, debido a la actual situación económica, una familia salteña necesita más de medio millón de pesos para no caer en la pobreza. Estos datos reflejan la alarmante magnitud de la crisis que afecta a la población.
De manera sorprendente, un relevamiento realizado por el ISEPCi reveló que, al analizar los precios de diversos productos, alimentos y alquileres, vivir en Salta resulta más costoso que en provincias vecinas como Tucumán y Chaco. Este hallazgo pone de manifiesto la complejidad de la situación económica en la región.
«Antes de que asumiera Javier Milei, una familia tipo necesitaba $5.700 por día para cubrir los gastos alimentarios, pero ahora esa cifra ha aumentado a $8.000», expresó Maigua durante la entrevista, evidenciando el impacto de las recientes medidas económicas en el día a día de las familias.
La crisis económica en Salta es un llamado de atención urgente, donde los ciudadanos enfrentan no solo la escalada inflacionaria sino también el aumento desproporcionado de los costos básicos para vivir. La comunidad salteña, junto con las autoridades pertinentes, busca soluciones efectivas para enfrentar este difícil escenario y recuperar la estabilidad económica en la región.